Batalla de Aljubarrota, minidebate rescatado del grupo social de whatsapp

De cuando en cuando se sucede un debate en el grupo social de Whatsapp que en realidad pertenecería al Códex o que sería mejor celebrar aquí para que quede constancia. Uno sobre el artículo de Pablo Ruiz Múzquiz acerca de la Batalla de Aljubarrota tuvo esta forma.

José Manuel Ordás

Estuve leyendo el ensayo de Pablo sobre la batalla, y me encantó. ¡Pedazo de trabajo!

Respecto a la arquería militar medieval, Aljubarrota es otro ejemplo más, junto a Crecy, Poitiers y Agincourt, de que los arqueros ingleses, aun siendo un cuerpo de élite, no podrían vencer por sí solos a la caballería pesada de élite; necesitaban tener el terreno a su favor. Por otra parte, en Aljubarrota eran una parte mínima en su ejército.

Sí me gustaría mencionar dos puntos en los que discrepo contigo, Pablo.

Primeramente, considero correcta la denominación de “Reconquista”. Negar ese término, que ya se utiliza en las fuentes medievales y sirve de acicate para los cristianos, sería como argumentar que no deberíamos denominar “Cruzadas” a las campañas militares en Ultramar, pues ni todas fueron iniciadas por la Iglesia, ni para todos los participantes el fin último era religioso.

Por último, no comparto esa dura crítica a quienes consideran que “esos habitantes del siglo XIV éramos nosotros”. Yo no veo problema en ser consciente de que las raíces de España hay que buscarlas en ciertos reinos más que en otros. Por supuesto, esto no implica silenciar derrotas o victorias; pero no podríamos decir que los reinos de Castilla o Aragón fueron tan importantes en la génesis y la cultura de España como los reinos de Portugal o Granada.

Juan Carlos Nieto
Muy de acuerdo

Pablo Ruiz Múzquiz

¡Hola! Pues muchísimas gracias por tus palabras, este trabajo “amateur” llevó bastante tiempo y trabajo y siempre es un gustazo comprobar que hay gente que lo disfruta y aprecia. Estoy de acuerdo en que los arqueros necesitaban ventajas tácticas tanto del terreno como de esa nueva forma de apoyarlos por caballeros desmontados.

Sobre tus discrepancias es posible que hayas malinterpretado lo que quería decir pero tampoco veo mayor problema en no compartir tesis. Sobre la Reconquista, me refiero no a poder hablar de “reconquistar” un territorio en época medieval, sino al concepto historiográfico mitificador surgido en el siglo XIX (a cada estado europeo le tocó buscar un origen legitimador más allá del trinomio Dios-Rey-Pueblo). Es tan atractivo narrativamente como simplificador. Esta legitimación simplificadora ya la usaron incluso faraones egipcios para los que siglos previos eran un tiempo legendario. Sobre las contribuciones menores o mayores de determinados reinos a estados modernos, no discuto en absoluto que hay grandes diferencias pero yo me refería a la tentación de aseverar, con 6 siglos de diferencia “ellos son nosotros” o “nosotros somos ellos”. Antropológicamente y sociológicamente es una barbaridad proyectarnos así. En cualquier caso, mi posición en general sobre estos temas, siempre controvertidos, es estar superalerta ante narrativas sugerentes (¡el cuento es poderoso!) que a) mitifiquen el pasado de una región y b) me prometan ser heredero de ese mito. Tienden a glorificar el pasado y relativizar el valor del futuro. Otra cosa es que me muestres manos en negativo de neandertales en una cueva y ahí te aseguro que glorifico lo que quieras como género “homo” jajajaja

José Manuel Ordás

Desde luego que no es malo discrepar (en ciertas cuestiones), si bien parece que estamos más o menos de acuerdo en casi todo…

Un placer debatir, como siempre. :relaxed:

José María Sánchez

A ver, una discusión sin sangre, ni bloqueos en Instagram o Facebook y de forma inteligente? Hemos perdido el norte o que? (Por si no se ha notado … Sarcasmo). Felicidades, compañeros. Aunque no suelo participar, lo he disfrutado

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En efecto, la palabra Reconquista no se usa hasta el s. XVIII, y no se populariza hasta el XIX. Las búsquedas compulsiva de mitos fundacionales para el concepto de nación liberal decimonónico es también un hecho constatado.

Pero que la gente busqué relatos no significa que la realidad deje de existir. El reino visigodo cristiano existió y se perdió. Los que recuperaron el territorio se sentían “nosotros” con respecto a los antiguos reinos, descendientes de los expulsados. Y nosotros, mayoritariamente, somos descendientes de esos reconquistadores, no de los “otros”.

El debate sobre la “reconquista” va a continuar porque hay puntos de vista dependiendo del momento: visigodos expulsados, reinos cristianos reconquistadores (se ven a sí mismos así, importante), estados nación que se reconocen una identidad, al menos una culturalmente heredada, y una sociedad posmoderna actual que pone el acento en la experiencia presente desvinculándose de todo pasado al que considera puro relato no realidad histórica(también lo piensa del presente).

Pd.- Pablo ha titulado con modestia su trabajo como ensayo, cuando realmente es mucho más. Por el rigor, el tratamiento, la argumentación, el aparato crítico que maneja … es un trabajo de investigación que confirma incontestablemente su hipótesis. Un ensayo es una opinión más o menos bien fundamentada. Ese trabajo está un nivel por encima.

Pd.- De las cruzadas también se podría hablar en ese registro.

Gracias por el aporte, Juan Carlos. Y gracias por darle ese estatus de trabajo de investigación, sin duda tienes un criterio más adecuado y no te voy a discutir ni un pelo esa categorización ¡faltaría más!

Quería comentar sobre todo mi frustración con el “ellos son nosotros” o, mejor “nosotros somos ellos” que suele estar detrás de celebrar u ocultar ciertos eventos históricos, que realmente era mi crítica ante la ignorancia en España de nada menos que esta batalla tan importante para la estructura política de la península ibérica actual.

Esto no quiere decir que no haya una herencia cultural y social obvia vinculada a qué reinos finalmente asentaron su control en la parte peninsular que luego dio lugar al estado moderno que es España. Lo que la gente a veces no comprende es que hablamos de periodos gigantescos no solo desde el siglo VIII hasta finales del XV (¡varias veces la historia completa de Estados Unidos, que ya tiene sus propios mitos fundacionales!) sino desde el Renacimiento hasta la actualidad.

Por supuesto que durante los siglos VIII a XIV hay mucha repoblación (que tiene que venir de algún lado) y expulsiones, pero no es un ejercicio de “ahora estamos aquí, ahora nos vamos allá, ahora volvemos, ahora nos vamos…” y así hasta que alguien para la “música del juego de las sillas” y quien estaba sentado en ese momento es nuestro ascendente… No, no puede haber tanta elasticidad, en términos poblacionales hay en realidad mucha más mezcla más estable durante más tiempo.

Pero si en un siglo XIX el relato legitimador de un estado moderno necesita que haya “bandos”, pues la Batalla de Aljubarrota no interesa remarcarla. No interesa porque:

1- no está vinculada al nuevo concepto historiográfico La Reconquista (no son cristianos contra musulmanes, son cristianos contra cristianos) así que no tiene “gancho” en virtud de ese relato.
2- es una derrota humillante sobre todo para Castilla que provoca nada menos que la consolidación del Reino de Portugal, un Reino (ahora estado) considerado de menor rango comparado con España.

Así pues, si asumimos “nosotros somos ellos” con la Batalla de Aljubarrota tendríamos que decir “Fuimos (nosotros) humillados por un estado ahora considerado inferior sin la posibilidad de (nuestro) resarcimiento ulterior venido con la Reconquista”. Y es una gran paletada porque al igual que somos rápidos al decir “Oye, yo no tengo que pedir perdón por lo que hicieron unos señores en América en la colonización” deberíamos aplicar esa distancia a estas otras cuestiones. Si fuéramos capaces de desembarazarnos de estos complejos, hoy la Batalla de Aljubarrota sería conocida sin pudor en la cultura popular, como lo es en Portugal.

Y egoistamente me interesa porque ¡había arqueros ingleses coincidiendo con la Guerra de los Cien años! ¡Me siento robado en mi propia tierra como amante de la arquería história!

Yo lo que si veo es que en aquella época, al medioevo me refiero, se daban unas alianzas un tanto curiosas, entre reinos cristianos contra reinos cristianos, sin salir de la península, entre cristianos y reinos de taifas contra otros reinos cristianos, siempre a conveniencia del que más poder tenia, claro. Y muchas veces cobrando tributos de los árabes para mantener una paz que se rompía con mucha facilidad.

¿Y si te dijera que quizá no son tan curiosas esas alianzas? Piénsalo bien ¿por qué piensas que son curiosas? ¿Quizá porque no encajan con un relato simplificador a posteriori estilo “Moros y Cristianos”?

Como decía en el trabajo sobre la Batalla de Aljubarrota, la Guerra de los Cien Años no se denominaba así “durante la propia época”, es algo posterior. Las vivencias “durante” no tienen por qué corresponderse con el “resumen” de siglos después.

Si consideras las dinámicas de poder como el verdadero motor de los acontecimientos políticos, entonces todas esas alianzas pasan a ser más que razonables. Y si además recuerdas que para una persona que vive en el, pongamos, 1112, todo su contexto se refiere a 1112 y el 1130 le parece un futuro lejanísimo, pues lógicamente resuelve el aquí y el ahora y ese “aquí y ahora” puede pasar por ponerse de acuerdo con el cacique musulmán de turno, que considera esas tierras su patria tanto o más que tú y que también quiere disfrutar de cierta estabilidad.

Hoy en día sucede igual. Vemos alianzas “un tanto curiosas” constantemente en la escena internacional pero incluso a nivel nacional se dan matrimonios extraños que se interpretan dentro de un análisis de correlación de fuerzas y dinámicas de poder.

Ahora voy a caer en algo un poco demagógico pero espero que se entienda el punto. Es muy habitual que nos cuenten (otros) cuáles son los bandos oficiales. Cristianos, musulmanes, izquierdas, derechas, urbanitas, rurales… pero en realidad el eje que persiste casi siempre es el control del poder, el resto es solo un apellido circunstancial.

Una de las motivaciones para crear SIAH fue precisamente poner en valor y recuperar la arquería peninsular más allá de la prehistoria, en donde podemos presumir y mucho. Precisamente por el hecho de que la arquería de prestigio en la península ibérica durante el medievo fuera patrimonio casi único de la tradición militar musulmana ha tenido como consecuencia un olvido vergonzoso “es que eran el enemigo, eran los OTROS”. Vamos, por favor… que no estamos en el recreo del colegio compitiendo con la clase de al lado.

Yo creo que poco a poco SIAH irá pudiendo estudiar y desvelar aspectos de la arquería y los arcos y técnicas en esa época. De hecho, entre otros, @Arquero.Historico ya está haciendo una labor fantástica :slight_smile:

A mi no me resultan curiosas esas alianzas, es una una forma de provocar unas respuestas. Es más, comparto todo lo que dices. Para un análisis imparcial de la Historia, sin sesgos, tenemos que dejar aparte muchas ideas que se nos han inculcado y ver los hechos con otros ojos. Como bien apuntas tenemos que situarnos en aquel entorno, y observar cómo se vivía y en qué condiciones. De hecho el entrar aquí en SIAH es mi pasión por la historia y conocer alguno de sus miembros. Es más las navidades pasadas me regalé el libro de Ismael y me hizo ver con ojos de arquero mi afición por la historia. Más tarde leí el ensayo en el que hablas de la batalla de Aljubarrota, y la verdad que me entusiasmó. Tanto por el trabajo que te pegaste como el enfoque que aportas….
Me gustaría que me recomendaras algún otro trabajo, libro … sobre la evolución y uso del arco. Un placer hablar contigo …

Ah, perdona, Rober, hablaba de ti pero era una expresión genérica, no me estaba refiriendo específicamente a ti con esas dudas.

Te puedo recomendar tres libros bastante diferentes:

  • The Bow Builder’s Book: European Bow Building From the Stone Afe to Today (varios autores, entre ellos nuestro amigo Jürgen Junkmanns)
  • Archery: its theory and practice (1856) de Horace Alfred Ford. Un clásico bastante desconocido pero que sienta las bases de la arquería deportiva moderna ya a mediados del siglo XIX. Un libro muy curioso.

En castellano hay poquísimo, espero que te defiendas bien en inglés…

Si el francés es lo tuyo, tienes Arc et Flèche, de Junkmanns, sobre la fabricación y utilización del arco en la época neolítica (europea), pero es difícil de conseguir, te lo podría prestar.

y aparte, una novela sin relación con los arcos pero sí con la época que estábamos comentando.

  • El aroma del arrayán, de Marceliano Galiano

No me lo he tomado como algo personal Pablo :wink:
Mi inglés es prácticamente nulo …. Con el francés me llevo mejor :wink: así que iré a por el de francés, intentaré localizarlo…. y la novela de Marcelino Galiano…. no será tan difícil de localizar. Muchas gracias.

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Vamos a ver al Jürgen Junkmanns el día 5, le puedo preguntar si tiene ejemplares.

Pues te lo agradecería eternamente … coge si quieres mi número de teléfono por si quieres que hablemos en privado, o bien lo hacemos por aquí. Aquí en Valencia se han editado varios libros sobre la expulsión de los moriscos en mi tierra. El libro es “Los moriscos de Cortes y los Pallás” de Jorge Antonio Cátala Sáez y Pablo Pérez García. Creo recordar que Ildefonso Falcones también nombra toda esta zona durante la vida en esta zona y su posterior expulsión en La mano de Fatima.
Un saludo.

Hola Arqueros

Soy uno de los arqueros y ya estoy en la 12ª edición de la recreación de la batalla de Aljubarrota.
En ediciones anteriores tuvimos con nosotros a varios Longbowmen de España, además de otras nacionalidades.
Los que quieran participar son siempre bienvenidos.
Sólo tienes que inscribir para el mail
medieval@companhialivre.com

Lamento que los carteles estén en su mayoría en portugués, pero espero que no les resulte difícil entenderlos.

En resumen, torneo de “Clout Shooting” por la mañana, ensayos y recreación de la batalla a las 18.00h del domingo 14 de agosto

Saludos