He pensado que estaría bien poner aquí un pequeño resumen de los cursos de tiro con pulgar que hemos ido impartiendo desde SIAH, con una pequeña reseña del mismo y algunas fotos.
Espero que sea de vuestro interés.
MADRID 2023
El curso tuvo lugar en octubre, y tuvo una buena acogida, contando con un total de 8 alumnos. María Martínez (Presidenta de la Compañía del Dragón en ese momento) y Juan Carlos (dueño del local y convaleciente de lesión) iban a venir en calidad de organización, pero les debió de parecer interesante, porque allí se quedaron hasta el final. El resto del grupo estaba integrado por Carlos, Ángela, Pablo, Fernando, Carmen y Santi.
El formato fue el de impartir la teoría en un local durante el primer día, y realizar el contenido práctico el domingo en Arqueros de Madrid. Tras la presentación y un ratito de explicar algunos conceptos introductorios, se vino la hora del café. Nos acercamos a un bar que nos recomendó Juan Carlos, y decidimos reservar para comer allí a eso de las 14:30. Tras una charla distendida volvimos al local a ver los tipos de arcos y sus diferencias. Empezamos a pasar diapositivas y a resolver dudas y cuando nos quisimos dar cuenta, ¡¡se nos había pasado la hora de la comida por completo!!
Una vez comimos, pusimos rumbo a los tipos de anillos, las flechas y la técnica de tiro. Lo que en principio estaba previsto que acabara sobre las 17 se nos alargó hasta las 19 de la tarde. Yo fui el primer sorprendido. No pensaba extenderme tanto en absoluto, pero por lo visto, si el saber no ocupa lugar, SI QUE OCUPA MUCHO TIEMPO. Jajaja. Más sorprendente aún fue que nadie se fuese a su casa aburrido de escucharme.
El domingo fuimos a ejecutar la parte práctica en Arqueros de Madrid, que nos trataron maravillosamente bien. Estuvimos aplicando las diferentes técnicas de tiro estudiadas el día anterior. Todos descubrieron que los conceptos que se ven muy claros en la pantalla son difíciles de llevar a cabo luego cuando uno agarra el arco.
Las primeras flechas costaron, pero poco a poco todos fueron interiorizando la técnica, y sus flechas, que inicialmente se desviaban muy a la derecha y clavaban muchas en el suelo, fueron empezando a agruparse en el parapeto.
El día comenzó a ponerse desagradable, con bastante frío y viento, lo cual unido cansancio manifiesto de pulgar que algunos empezaban a sentir, hizo que pusiésemos punto final al curso.
VALENCIA:
Durante el fonsado de 2023 Organizado por la Compañía del Falcó, Sandra (la Presidenta de la Compañía de Edetanos) me pidió ayuda para resolver sus dudas con el tiro con pulgar. Le di algunos consejos, pero quedó patente que se hacía necesario dedicarle más profundidad al tema. Así que durante unos meses estuvimos en contacto y decidimos llevar el curso de tiro con pulgar a Torrent, Valencia.
Allí teníamos una compañía de inquietos arqueros dispuestos a aprender. Ellos eran: José Manuel, Toni, Yolanda, Roberto, y la propia Sandra.
Lo primero que debo decir es que fueron tremendamente acogedores y generosos. Unos anfitriones excelentes, que me hicieron sentir como en casa.
Para impartir el curso, Sandra había conseguido una sala que generosamente nos cedió una Parroquia de la localidad (perdonad mi imprecisión pero mi memoria para los detalles a veces no es una gran aliada). Resultó muy curioso y objeto de unas cuantas bromas, explicar el uso de arcos tradicionalmente relacionados con el islam y culturas musulmanas (junto con otras, por supuesto), rodeados de elementos católicos.
Allí pasamos el día compartiendo información y tratando de identificar el tipo de arco que cada uno poseía y no terminaba de distinguir a qué tipo se correspondía, ni qué cultura en la historia lo había utilizado en su contexto.
Al terminar el sábado, nos emplazamos para el día siguiente. Pero lejos de irse cada uno por su lado, fuimos a cenar y a dar un paseo esa noche e intentar hablar de cosas que no fuese únicamente tiro con arco. Escultura, medicina tradicional, o la propia cultura fallera propia de la zona protagonizaron conversaciones y momentos difíciles de olvidar.
El domingo fuimos a la línea del Camp de Tir Penya Roja, y estuvimos probando diferentes técnicas y anillos. Alguno tenía más de un arco (cosas de la recreación) y pudimos probar como se comportaba cada uno y qué tipo de técnica y anillo correspondía mejor. Fue una mañana agradable y con un tiempo muy bueno para ser el mes de noviembre (hasta creo que me quemé un poco por el sol).
El hecho de tirar en llano y con una línea sin vegetación cerca hizo que hubiese pocas bajas entre las flechas, y sus propietarios rápido incorporaron el patrón motor del gesto técnico.
Ante las dudas respecto a las flechas y la longitud de los vástagos, estuvimos midiendo la apertura de cada uno buscando el full draw para segurarnos una muy buena alineación. Así, cada uno podría después tener claro a qué longitud cortar los vástagos, y poder trabajar bien en su técnica.
Se suponía que el curso terminaba ahí. Pero cómo iba a marcharme sin que fuésemos a comer en grupo. Qué maravilloso grupo y espectacular fin de semana. No me extraña que organicen el fonsado 2024, que estoy seguro que será todo un éxito.
MADRID 2024
En marzo de 2024 organizamos una nueva edición del curso de tiro con pulgar. Fue María quien me propuso realizarlo. Yo sabía de algún compañero interesado, pero no pensé que fuese a tener mucho éxito en cuanto a volumen de alumnos. Menos mal que para estas cosas me dejo guiar por el entusiasmo de los demás. Menuda sorpresa. Ni más ni menos que 13 alumnos, y porque decidimos limitar el cupo para asegurar un correcto control del grupo y unas adecuadas condiciones para el aprendizaje. Hubo alguno que quedó pendiente para futuras ediciones si conseguimos encajar las fechas. Los aplicados alumnos fueron: Haritz, David, Luisa, Patry, Miguel, Ricardo, Boni, Sara, Santi, Patricia, Álex y Paulino.
Comenzamos con la teoría y descubrimos que algunos de los alumnos habían practicado kyudo, y se planteaban cuanta transferencia entre ese tipo de tiro con arco y el tiro con pulgar podría haber. Descubrimos que muchas de los principios que conocían están incluidos en la técnica de tiro que explico yo. Existen muchos más puntos en común que diferencias, y para mí supuso también un gran aprendizaje y un bonito acercamiento hacia el tiro con arco japonés. En la parte mental que explico en el curso se contextualiza mucho mejor la parte ritual del kyudo y se entiende el porqué de muchos de sus solemnes movimientos.
Para este curso tuve la posibilidad de incorporar un proyector, lo cual hizo más factible que los alumnos pudiesen apreciar mejor las diapositivas, con las fotos y los vídeos correspondientes. Como siempre, tuvimos el debate sobre anillos de cuero versus anillos rígidos, y el domingo pudieron experimentar el uso de unos y otros.
Ya en arqueros de Madrid (que volvieron a tratarnos de forma espectacular), estuvimos disparando a dos dianas circulares que hicieron la delicia de los buscadores de flechas. Al cabo de un rato pudimos pasar a los parapetos, que estaban más cerca, más en llano, y que suponen un objetivo mucho más grande.
Paulino trajo dos arcos, un hornbow mongol hecho en Mongolia, que resultó domesticable, y su arco escita Grozer. Este último no sólo tiene una potencia desmesurada, sino que al ser de un tamaño pequeño se hace verdaderamente difícil de abrir. Es cierto que es un arco rapidísimo, pero hay que estar bien fuerte para llevarlo al full draw.
David trajo un arco desmontable, con una estética muy bonita. Era un mughal “crab bow”, pero de gama baja y con una problemática en el rendimiento: que, al disparar, la cuerda no quedaba centrada y se salía de los siyahs. No supuso un problema de seguridad, pero nos hizo concienciarnos a todos que hay arcos de gama baja que igual no merecen la pena por muy bonitos que sean.
Tuve la suerte de poder probar el tiro con guante de kyudo y la sensación fue muy positiva. Requiere un tipo de técnica similar a algunas de las que enseño, y la liberación mediante el giro facilita los procesos mentales que deben ocurrir en el momento de la suelta para todo arquero. Lástima no haber podido probar el yumi, pero tuvimos la mala suerte de que se rompiera la cuerda en la primera flecha que tiró su dueño Miguel.
Tras una mañana espléndida, nos despedimos con una foto de grupo y muy contentos de haber compartido la experiencia.
